10 razones para votar NO a la Jornada Continua
1. Salud y bienestar de los niños y niñas
La jornada partida es más respetuosa con los biorritmos de niños y niñas
La evidencia científica muestra que el horario escolar que mejor se adapta a los biorritmos comienza entre las 8:30 y 9:00, realiza la pausa para comer entre las 13:00 y 14:00 y finaliza a las 16:30. Así lo recomiendan:
– La Soc. Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria y Soc. Pediatría Valencia (aquí).
– El Consejo Escolar de Navarra (CEN ver aquí, pg 104).
– Sociólogos expertos en cronobiología (ver aquí) e instituciones como Fundación Bofill (ver aquí, pg 13)
En jornada partida hay menos déficit de sueño que en la continua (ver aquí, pg 268).
La jornada partida favorece la crono-nutrición
L@s expert@s en nutrición recomiendan no retrasar la hora de la comida más allá de las 13:00 horas.
La mayoría de los países respetan el horario de comida antes de las 13:00 en la escuela. Esto favorece la salud de l@s niñ@s, ayuda a sus biorritmos y a prevenir la obesidad. Así lo afirman:
– Expert@s en cronobiología, como el pediatra experto en sueño y cronobiología Dr Pin (ver aquí).
– Artículos científicos en obesidad, como en los que colabora Marta Garaulet (ver aquí).
– Documentos resumen de la confederación de AMPAs Gonzalo Anaya (ver aquí).
2. Salud mental y socialización
Se favorece la socialización de l@s niñ@s
Pasar más tiempo en la escuela tiene un efecto positivo sobre el bienestar socioemocional del alumnado (ver evidencias en el informe de EsadeEcPol aquí, pg 24)
La jornada partida favorece el uso del patio como espacio de articulación social:
– L@s niñ@s salen todos a la vez y con tiempo para jugar (inexistente si salen a las 14:00).
– Los padres y madres interactúan, comparten dudas y soluciones sobre la crianza y se apoyan
El alumnado vulnerable socializa más y está menos expuesto a trastornos emocionales (tristeza, soledad)
Menor uso de pantallas
La Jornada partida favorece la prevención del sobreconsumo de pantallas y de los riesgos derivados de estas, como el déficit de atención o la exposición a contenido inapropiado a edades tempranas (ver evidencias en monografía CEN aquí, pg 30 y entrevista a Daniel Gabalón, aquí)
En tiempos de individualismo y pantallas, la escuela genera comunidad
3. Relación niñ@-escuela
Tiempo para relacionar escuela con disfrute
Tanto el tiempo lectivo como el no lectivo son importantes para l@s niñ@s.
Si la escuela se reduce a un ‘carrusel de asignaturas’ compactadas de 9 a 14, pierde espacio para el juego, las relaciones y el disfrute.
En la jornada partida, como en la ‘escuela a tiempo completo’, hay mayor espacio para otras actividades, más tiempo de ocio educador, tiempo de juego en patios y comedores, tiempo de aprendizaje utilizando el entorno, el espacio exterior al aire libre y la interacción con entidades del barrio (CEN, ver aquí, pg 29).
Menos deberes para casa
La jornada partida, al no estar tan “compactada” y adaptarse mejor al ritmo de l@s niñ@s, aprovecha mejor el tiempo y eso influye en la menor necesidad de deberes fuera de la escuela (CEN, aquí Pag 103, y resultados de estudios realizados en Valencia, aquí, pg 4)
Si conseguimos que los niñ@s disfruten en la escuela, alcanzarán sus metas
4. Rendimiento académico
Aprovecha los picos atencionales
L@s niñ@s no aprenden ni rinden por igual durante todas las horas del día. La partida se adapta mejor a los picos atencionales:
– ver Monografía CEN, pg 67, aquí
– ver video divulgativo del psicólogo Alberto Soler, aquí
La jornada partida permite unos tiempos más lentos: se pueden esclarecer dudas entre compañer@s, preguntar a profesores y ‘descansar’ la mente entre asignaturas para interiorizar lo aprendido
Indicios de mejores resultados académicos
El buen rendimiento escolar depende de muchos factores, como el nivel cultural y económico de las familias, la ratio, los medios para integrar la inmigración, etc. Ahora bien, todos los indicios apuntan a que permanecer menos tiempo en la escuela es perjudicial para el rendimiento escolar (ver ejemplos aquí, aquí en resumen o aquí, en resumen).
La jornada continua perjudica sobre todo a alumn@s con dificultades para los que es más difícil seguir el ritmo en una jornada comprimida. La OCDE ha recomendado a España volver a la jornada partida para reducir el fracaso escolar(aquí y aquí).
5. Euskera
Mejora la inmersión en Euskera
La jornada partida beneficia la inmersión lingüística de l@s txikis de familias no euskaldunas que no tienen la oportunidad de comunicarse en euskera en otros espacios.
El tiempo escolar no lectivo (patio, comedores) se reduce en la jornada continua, y no disponen de tiempo real para interaccionar con los compañeros en ese idioma. Asocian euskera sólo a la clase. Ese tiempo supervisado es una oportunidad única para que traten de relacionarse en euskera.
Tras la jornada escolar, con la jornada continua desaparece la comunidad del patio, y las familias tienden a dispersarse, teniendo los txikis menos oportunidad de socialización en euskara.
6. Comedor / Extraescolares
Mejores precios comedor
El comedor escolar es un arma irrenunciable para fomentar la igualdad en educación nutricional. (Ver Monografía CEN, pg 92 y 104, aquí). L@s expert@s recomiendan que el comedor sea considerado un elemento educativo curricular más. Con la jornada continua, su uso ha caído: en España, sólo un 38,6% del alumnado es usuario del comedor (CEN, aquí, pg 26)
A menor número de usuarios, los precios se encarecen, al ser presupuestos según nº de niñ@s
Disminuye la necesidad de extraescolares
Con la jornada partida, más cercana al concepto de ‘escuela a tiempo completo’, se requieren menos extraescolares de refuerzo, ya que los conceptos se integran de una manera más pausada.
La jornada partida tiene 2h y 30 min más que la continua. Hay además más tiempo para el ejercicio y se pueden aprovechar los tiempos entre clase y comedor para actividades más lúdicas/creativas.
En la mayoría de CCAA con jornada continua las extraescolares gratuitas se van degradando o incluso desapareciendo (CEN, aquí, pg 26)
Existe el riesgo de que, a medio plazo, esto ocurra en Navarra. Esto puede conducir a lo que el sociólogo experto Daniel Gabalón denomina estrategia privatizada del tiempo libre según capacidad de la familia y ocupa un tiempo que antes era público e igual a todas las personas’ (ver aquí).
7. Conciliación
Más compatible con los horarios laborales
La jornada Partida facilita la conciliación, en especial para las mujeres (ver Monografía CEN, aquí, pg 23)
Hay familias que no pueden adaptar su jornada a la jornada continua (separados, monomarentales/ monoparentales, con un miembro de la pareja enfermo o con discapacidad, con problemas económicos, por otros motivos laborales, sin abuelos o familia que pueda ayudarles etc.). Estas se ven obligadas a usar extraescolares de 15:00 a 16:30, que no siempre garantizan alta calidad.
En la jornada continua, de 15:00 a 16:30 los niñ@s no están atendidos por sus docentes de referencia, mientras que en la partida, en ese horario l@s niñ@s están aprendiendo y socializando en igualdad de condiciones.
Reuniones a horas asequibles
Al aumentar la presencia del profesorado en el centro, esto permite que las reuniones con los docentes puedan realizarse en horarios más compatibles con los horarios laborales de l@s padres/madres, y puedan asistir ambos.
La jornada partida facilita la interacción entre familias y profesorado a la hora de la salida para la mayoría de las familias, no sólo para quienes salen a las 14:00.
8. Brecha pública-concertada
Si públicos hacen continua pero concertada no, la brecha crece
Aunque influyen muchos otros parámetros, los resultados académicos en los centros públicos son, por desgracia, peores que en los concertados. Desde que se tiene registro en Navarra, la diferencia de puntuación en el informe PISA, que realizan los alumnos cuando tienen 15 años, siempre ha sido a favor de la concertada.
No podemos resignarnos a tener una escuela pública de segunda.
Es previsible un trasvase a la escuela concertada
Los centros concertados de nuestro entorno mantienen la jornada partida, y los públicos cada vez menos. A las diferencias entre pública y concertada hay que sumarle ahora el tipo de jornada (ver aquí, punto 4). Es un motivo más por el que muchas familias están optando por la concertada, a veces, en contra de su deseo inicial (ver aquí).
Tanto por resultados académicos como por facilidad de conciliación, aquellas familias con poder adquisitivo medio-alto que prioricen la calidad que aporta la jornada partida podrían optar por la educación concertada. Esto todavía incrementaría más la brecha público-concertada, a pesar de estar ambas financiadas por todos.
Por una escuela pública de calidad que evite la segregación por clase social
9. Igualdad social
Más tiempo en escuela, más igualdad social
Mayor tiempo en la escuela se correlaciona con una mayor igualdad social (evidencia científica clara)
La jornada partida reduce el fracaso escolar, sobre todo en familias con menos recursos y en alumn@s con especiales dificultades, lo que aumenta la igualdad (ver informe OCDE aquí).
La compactación horaria tiene un fuerte impacto multiplicador de la desigualdad social, al restar tiempo de presencialidad en la escuela y dejar más tiempo solos por las tardes a los “niñ@s-llave” que en 2009 suponían el 11% de los niñ@s entre 6 y 14 años en España (Educo, 2017), y que habrá aumentado en 2023, con 1 millón más de mujeres ocupadas a tiempo completo respecto al 2009 (ver Monografía CEN, pg 13, aquí, pg 13).
La sociedad pierde igualdad en jornada continua
Una jornada escolar continua (o compactada) es una fuente de desigualdades educativas y sociales entre el alumnado. La pandemia ha mostrado cómo la presencialidad es un elemento clave de la política educativa: cuando la escuela se reduce o se suprime, se amplifican las desigualdades entre alumn@s de distinto origen social (ver informe EsadeEcPol, pg 10 aquí).
La educación pública no debe dejar a nadie atrás
10. Igualdad de género
Mayor igualdad de género real
La jornada escolar continua tiene un efecto negativo y significativo en la igualdad de género.
Las mujeres son las que mayoritariamente se reducen la jornada, y son quienes concentran el 66,4% del impacto, lo cual contribuye a agravar las brechas de género existentes (ver Informe EsadeEcPol, pg 20, aquí)
Y además…
Si sale continua, la jornada será irreversible, ya que como los que han de solicitar cambios futuros de jornada son el consejo escolar de cada centro, y está formado por mayoría profesores, que van a priorizar sus intereses y no los de los niñ@s, nunca solicitarán realizar una consulta.
Sin embargo, si sale partida, a los cuatro años se volverá a hacer votación, porque el consejo escolar estará dispuesto a hacerla con alta probabilidad, y la normativa lo permite.
¿No es mejor diseñar estudios rigurosos y evaluarlos científicamente antes de implementar una jornada experimental sin evaluar, como es la continua?
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